Cultura e historia
Djibouti se formó en la unión de África y Arabia: la base de la identidad está establecida por los afares y los somalíes (issa), las tradiciones nómadas, la poesía oral y los ritmos musicales de Horne-of-Africa.
El Islam juega un papel central en la vida cotidiana y los valores, estableciendo un estilo social moderado y escepticismo hacia las prácticas de juego.
El pasado colonial francés y la independencia de 1977 dejaron huella en la lengua, la urbanística y el sistema administrativo, y el puerto de Djibouti Villa en la apertura a influencias externas.
La vida cultural se mantiene en la hospitalidad, los rituales del té/café, la cultura del bazar y la gastronomía marina de la costa.
Con este telón de fondo, el gambling comercial no se percibe como parte del ocio tradicional: la norma pública son las formas familiares y comunitarias de recreación sin apuestas monetarias.