Juegos y tragamonedas
El mercado de juegos de Japón se basa en el pachinko y el pachisló, un híbrido de máquinas tragamonedas y mecánica arcade legalizado como «entretenimiento» en lugar de juego.
Las ganancias se emiten a través de un sistema de intercambio triple (premios → fichas → efectivo fuera del establecimiento), que no viola formalmente la ley.
Estos autómatas combinan elementos de tragamonedas y videojuegos, con temas japoneses reconocibles: anime, samurai, cultura pop.
Las tragamonedas tipo western solo están permitidas dentro de los resorts de IR, bajo la supervisión de la Comisión de Casinos.
Además del pachinko, las loterías numéricas takarakuji y las apuestas públicas deportivas son populares.
El foco principal de los reguladores es el control de la frecuencia de las visitas, la protección contra la ludomanía y la responsabilidad de los operadores.
El estilo visual y el diseño de los juegos siguen siendo parte integral de la cultura popular japonesa.