La base legal del gambling británico está consagrada en el Gambling Act 2005, que creó la UK Gambling Commission (UKGC) y cubre la concesión de licencias de servicios terrestres y remotos (remote), así como delitos comunes.
UKGC emite licencias operativas y personales y aplica LCCP (términos de licencia y códigos de práctica).
Para los operadores en línea, el circuito multi-operador auto-excluyente GAMSTOP es obligatorio; las reglas de publicidad son controladas por ASA a través de CAP/BCAP con una mayor protección de los menores (prohibición de anuncios de «fuerte atractivo» para <18).
En 2023, el gobierno presentó White Paper sobre la reforma de la «era digital», y en 2024-2025 se aprobaron límites de apuesta para las tragamonedas en línea: £5 por giro (25 +) y £2 (18-24), como parte del paquete de reducción de riesgos.
Los operadores deben cumplir con los requisitos de KYC/AML, verificación de edad y geolocalización, transparencia de pagos y juego responsable.