El mercado en línea de los Países Bajos opera a través de Remote Gambling Act (KOA) bajo la supervisión de Kanspelautoriteit (Ksa); los soportes clave son un único registro de autoexclusión CRUKS y una base de datos de control (CDB) obligatoria para monitorear los datos de los operadores.
Desde el 1 de julio de 2023 está vigente la prohibición de la publicidad no comercial (TV/radio/publicidad al aire libre, etc.), seguida de la eliminación del patrocinio deportivo; Ksa penaliza activamente y amplía la supervisión.
En 2025, el gobierno anunció una «reconfiguración del curso»: más herramientas para bloquear a los ilegales y aumentar el control de las ofertas legales.
El impuesto a los juegos (kanspelbelasting) se eleva: del 30,5% al 34,2% GGR en 2025, con un plan de crecimiento al 37,8% en 2026.
Las licencias requieren un estricto cumplimiento (WWFT/AML, política de prevención de adicciones), los requisitos actualizados y las verificaciones de CDB se fijan antes del ciclo de renovación de licencias más cercano.