Juegos de azar y casinos en línea en Bahréin
Bahréin es un pequeño pero económicamente desarrollado Estado del Golfo,
donde se cumplen estrictamente las normas islámicas, sin embargo, a diferencia de Qatar o Arabia Saudita,
aquí está presente un enfoque moderado de las cuestiones de moral y entretenimiento.
El juego está oficialmente prohibido por la ley,
pero de hecho, el país demuestra tolerancia a los juegos offshore en línea,
especialmente entre expatriados y turistas extranjeros.
Fundamento jurídico-religioso
El Islam (rama suní) es la religión estatal de Bahrein,
y la sharia es la fuente de la legislación.
El Corán prohíbe expresamente el juego (maysir, qimār),
definiéndolos como «oprobio de Satanás»,
lo que significa que cualquier forma de juego es contrario a las normas islámicas.
Evite que tengan éxito"
(Sur Al-Maida, Ayats 90-91)
Las autoridades de Bahrein apoyan formalmente este principio
pero a diferencia de los Estados vecinos,
no realizan campañas religiosas masivas contra el juego
y no utilizan la persecución penal para los usuarios comunes.
Legislación y sanciones
Principales actos jurídicos:1. El Código Penal de Bahrein (arts. 308-310) prohíbe la organización y la participación en juegos de azar.
2. Ley de Delitos Cibernéticos (2014) - Prohíbe el uso de Internet para el juego.
3. Ley de Medios y Publicidad (2002) - prohíbe la promoción de casinos y apuestas.
Posibles sanciones:En la práctica, las sanciones se aplican exclusivamente a los organizadores,
mientras que los usuarios normales prácticamente no son procesados.
Situación real
Bahréin es conocida como la monarquía más liberal del golfo Pérsico.
Aquí se permite el alcohol, hay discotecas,
y la política turística busca atraer extranjeros.
Sin embargo, no hay casinos oficiales en el país,
y toda organización de juegos de azar dentro del Estado se considera ilegal.
Sin embargo, en los últimos años ha habido un crecimiento activo del gambling en línea entre los expatriados,
que operan en los sectores del petróleo, el gas y las finanzas.
El acceso se realiza a través de una VPN,
y los cálculos son a través de criptomonedas o billeteras internacionales.
Principales plataformas:- 1xBet
- BetWinner
- Stake
- BC. Game
- PokerStars
Según Arabian iGaming Insight 2024,
unos 150.000 usuarios de Bahréin visitan sitios web extraterritoriales cada mes,
y el volumen de apuestas ilegales se estima en más de 500 millones de dólares al año.
Control y supervisión
El control de Internet se lleva a cabo mediante:- Telecommunications Regulatory Authority (TRA): filtrado de sitios y VPN;
- Ministerio del Interior - Investigación de los delitos cibernéticos;
- Ministerio de Justicia y Asuntos Islámicos - Supervisión de la conformidad con la sharia.
Aunque los sitios de juego están oficialmente bloqueados,
las tecnologías para eludir la censura son ampliamente conocidas.
Miles de usuarios utilizan diariamente servicios VPN, proxy y DNS cifrados.
Gambling en línea y criptomonedas
Las criptomonedas no están prohibidas en Bahréin,
y el Banco Central (CBB) uno de los primeros de la región
autorizó los intercambios de criptomonedas y empresas fintech con licencia.
Esto ha hecho que el país sea atractivo para los
quién está buscando maneras de participar en el juego en línea a través de transacciones anónimas.
Principales tendencias:- depósitos a través de USDT, Bitcoin, Ethereum;
- la retirada de ganancias a través de Binance P2P o Rain Exchange (licencia de Bahrein);
- el uso de Tron y Litecoin para microtransacciones.
Aunque el Gobierno es consciente de esos planes,
prefiere no interferir,
si se trata de sitios extraterritoriales y no residentes.
Política de turismo y entretenimiento
Bahrein desarrolla activamente el turismo de entretenimiento.
Aquí se realizan carreras de autos Fórmula 1 Bahrain Grand Prix,
festivales de música y conferencias internacionales.
Sin embargo, el juego sigue siendo tabú.
Los expertos señalan que con un mayor liberalismo económico
Bahréin podría convertirse en el segundo candidato después de Emiratos Árabes Unidos para legalizar parcialmente los casinos
dentro de las zonas turísticas para extranjeros.
Sin embargo, esto es poco probable en los próximos años debido a la presión de los círculos religiosos.
Aspecto sociocultural
La sociedad de Bahrein es heterogénea:- los musulmanes (alrededor del 70%) se adhieren estrictamente a los principios islámicos;
- los expatriados (alrededor del 30%) se refieren al gambling de manera neutral,
- tomándolo como un elemento de ocio.
Para los ciudadanos, el juego es un pecado y una violación de las tradiciones,
y para los extranjeros, parte del estilo de vida habitual,
por lo tanto, las autoridades tratan de equilibrar entre el conservadurismo y la apertura.
"No fomentamos el juego, pero tampoco interferimos en los asuntos personales de aquellos,
quién juega fuera del país o en línea sin una demostración pública"
Dimensión económica
Bahrein, al igual que otros Estados del Golfo,
busca formas de diversificar la economía.
En lugar de casinos, apuesta por la tecnología financiera, la industria criptográfica y el turismo.
Sin embargo, los expertos creen que en el futuro,
con una creciente competencia con los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita,
la posible legalización parcial del negocio del juego en forma de «licencias de entretenimiento»
para operadores extranjeros en zonas de vacaciones.
Perspectivas
En los próximos años, Bahrein mantendrá la prohibición oficial del juego,
pero seguirá desarrollando servicios financieros y turísticos,
incluyendo blockchain y eSports.
Es probable que en la década de 2030 el país pase a un modelo de tolerancia limitada -
por ejemplo, la concesión de licencias de casino en hoteles para extranjeros,
similar a los proyectos de los Emiratos Árabes Unidos (Wynn Resorts) o Arabia Saudita (Neom).
Bahrein ocupa una posición intermedia entre la estricta sharia y la libertad económica.
Aquí no hay casinos legales y juegos en línea,
pero el Estado no lucha agresivamente contra los sitios extraterritoriales,
especialmente cuando se trata de jugadores extranjeros.
pero sin conflicto público con el poder.
Bahrein sigue siendo un ejemplo de un enfoque islámico suave,
donde la prohibición existe formalmente,
y la realidad avanza gradualmente hacia la libertad digital regulada.