Leyes y reglamentos
En la Sultanía de Omán, todas las formas de juego están prohibidas por las normas religiosas y penales.
No hay licencias para casinos, casas de apuestas, póquer, sorteos o casinos en línea; el acceso a sitios de juegos y aplicaciones está bloqueado por los proveedores.
Se prevén multas y posibles responsabilidades penales por la organización, participación, publicidad e intermediación, y los bancos y servicios de fintech aplican procedimientos KYC/AML que frenan las transacciones de «juego».
Solo se admiten actividades de entretenimiento sin entrada pagada y elemento de aleatoriedad (juegos de habilidad, quices educativos).
Recomendación para empresas y medios de comunicación: renuncia total al componente de juego y auditoría legal previa de cualquier mecánico promocional con premios.