Cultura e historia
Kiribati es una cultura polinesia-micronesia con una fuerte identidad oceánica: la vida, las artesanías y la mitología están estrechamente relacionadas con el mar.
El corazón de cada asentamiento es el maneaba, una casa-consejo comunitario donde los clanes (kainga) discuten los asuntos, celebran y conservan las tradiciones orales; los asientos se distribuyen a lo largo de los «bloques» genéricos (boti), lo que refleja la estructura social.
La lengua y el kiribati (Gilbertese) y los cantos corales acompañan la danza te mwaie - con claras expresiones faciales y «olas» de manos que recuerdan la navegación y las mareas.
En el hogar es común tejer de pandán, pescar, jugar te ano, y el jugo de coco (karewe) y el pescado son la base del menú.
Los contactos europeos se intensificaron en el siglo XIX; en 1892 el territorio se convirtió en un protectorado británico, luego en la colonia Gilbert and Ellice Islands.
La extracción de fosfatos en la isla de Banaba provocó el traslado de parte de los banabíes a la isla de Rabi (Fiji).
En 1943, el atolón de Tarawa se convirtió en el escenario de una de las batallas más feroces del Pacífico.
La independencia fue proclamada el 12 de julio de 1979.
Hoy en día, la agenda cultural conecta las comunidades cristianas, las costumbres rústicas maneaba y la diáspora moderna; los temas de la conservación de la lengua, la tierra y la adaptación al aumento del nivel del mar pasan a un primer plano.